Esencia
Lo visible no lo es todo. Lo audible es sólo un poco. Lo material no es lo esencial.
La materia no permanece, no perdura permanentemente, no prevalece al final.
Somos iguales en esencia, no en apariencia.
Simplemente ser es simple, aunque no fácil. Cuando pensamos demasiado y creemos en nuestros pensamientos, nos alejamos de la experiencia directa, de lo que es, de lo que más importa.
Poco es urgente. Más es importante. Casi nada es esencial. Casi todo es significativo. Nada es permanente. Todo es lo que es.
Todo es lo que es, ni bueno ni malo, pero mejorable.
Fundido en la naturaleza de lo que es y de lo que somos está lo de aquí y lo de allá. Después de todo, no hay esto, aquello, lo otro, aquí ni allá.
Sólo la esencia es inmutable, quizás.
Té y fe. Ya.