Alabanza
La alabanza alza nuestras cometas hasta encontrar aire puro, como las ramas llegan alto, esperanzadas.
Cuando al abrir la boca alabamos, agradecemos, apreciamos. Así aprendamos.
¡Aleluya al amén!
La alabanza alza nuestras cometas hasta encontrar aire puro, como las ramas llegan alto, esperanzadas.
Cuando al abrir la boca alabamos, agradecemos, apreciamos. Así aprendamos.
¡Aleluya al amén!